El presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, ordenó el miércoles pasado a las tropas oficiales que dispararan a los genitales a las mujeres que combaten del lado de los rebeldes, informa The Washington Post con cita a medios locales.
"Díganles a los soldados" que hay una "nueva orden" promulgada por "el alcalde", expresó el mandatario filipino, quien anteriormente se había desempeñado como alcalde de Dávao, durante un discurso pronunciado ante exrebeldes comunistas.
"No vamos a matarlas", sino que "tan solo les dispararemos en la vagina", manifestó Duterte ante las risas del público, y agregó que "si no hay una vagina, sería innecesario".
La transcripción de las palabras del presidente filipino fue publicada por la Oficina Presidencial de Comunicaciones, donde la palabra 'vagina' fue omitida y reemplazada por guiones.
Desde el movimiento feminista filipino Gabriela repudiaron las declaraciones del presidente. Duterte "promueve abiertamente la violencia contra las mujeres y contribuye a la impunidad", opinó una representante de esta organización, además de describir al mandatario como "el más peligroso de los machos fascistas en el Gobierno".
A su vez, Carlos Conde, investigador de la ONG Human Rights Watch, calificó las palabras de Duterte de "lo último de una serie de expresiones misóginas y degradantes" que instigan a los soldados a "cometer violencia sexual durante los conflictos armados", lo cual constituye una "violación de las leyes humanitarias internacionales".
