El reciente paso de Beryl por República Dominicana, que parecía llegar en forma de huracán y luego redujo su intensidad para ser catalogada como una "tormenta tropical", de las muchas que habrá en los próximos meses, dejó su huella en aquel país caribeño: al menos 2.348 viviendas afectadas, siete de ellas destruidas, 11.740 personas desplazadas a casas de familiares, 22 en albergues oficiales, una comunidad incomunicada y 22 provincias en alerta, además de puentes y acueductos alterados, según los boletines publicados por el Centro de Operaciones de Emergencias (COE).
El recuerdo del huracán María en esa nación, que terminó en septiembre de 2017 con un saldo de cinco muertes según Listin Diario, resuena cada vez que se anuncian fuertes lluvias en América Central.
El recuerdo del huracán María en esa nación, que terminó en septiembre de 2017 con un saldo de cinco muertes según Listin Diario, resuena cada vez que se anuncian fuertes lluvias en América Central.
Para comprender el impacto del cambio climático en este país caribeño es necesario repasar algunos datosbrindados por la Oficina Nacional de Estadística (ONE). En ese sentido, sobresale que Dominicana tiene una población estimada para este año de 10.266.149 habitantes, pero vale destacar que en el 2016 se registraba una pobreza general del 28,9% y una pobreza extrema del 6%. Asimismo, desde el Estado afirman que casi la mitad de los ciudadanos mayores de 12 años no utiliza internet, reflejando que las comunicaciones también son un conflicto a resolver. "Tuvimos la suerte de que el ojo de la tormenta no pasó por aquí", destaca el director técnico del Consejo Nacional para el Cambio Climático y Mecanismo de Desarrollo Limpio, Moisés Álvarez. "Hubo bastantes lluvias, y algo que hace bastante tiempo no veíamos; un aguacero de diez o 12 horas, relámpagos y truenos", repasa sobre lo vivido hace tan solo unos días.
Ver reportaje completo en RTNOTICIAS