Este segundo libro, publicado recientemente por Editorial
Círculo Rojo, en España, ofrece las herramientas para alcanzar los deseos y
tener momentos llenos de amor. Con un
título directo, claro e impactante, así se presenta “+ de 50 posiciones para
hacer el amor con… Dios”, una obra con la que su autora pretende que sus
lectores disfruten de un rato agradable pero, sobre todo, que aprendan a ser
felices. Sin duda, un libro dirigido a todos aquellos que necesiten una
orientación en su complicado camino por la vida y en el trajinar del día a día.
Con esta obra disfrutaras de la vida y percibirá claramente el positivismo que
transmite su autora.
Shasha, quiere que sus lectores entiendan que vivir sí
tiene sentido, además, entiende que el
enseñar a vivir a los demás es un maravilloso deber y placer de cada ser
humano. Entrarse en la profundidad de esta obra le permitirá conocer realmente
quien es, la cuestión donde radica la solución de todos los dilemas. Este libro
le mostrará cómo usar sus poderes de creatividad a través del amor, poniéndolo
en acción para que se hagan realidad todos sus deseos. Podrá responder con
exactitud las preguntas que se hace y que le hacen habitualmente.
Es sin duda
un ejemplo de felicidad y nos da a
demostrar que realmente sí se puede ser “inmensamente” feliz todos los
días. Esta obra rebosa las buenas actitudes, emociones y positivismo. Inspirada
especialmente en el “amor que le tenemos a Dios, pero no nos atrevemos a hacer
el amor con él, ni hacer las cosas que él quiere que hagamos, que seamos todos
hermanos, sin odios ni rencores” reafirma la escritora. Aquí cada lector se
encontrará con poemas e inspiraciones de amor, con historias que dejamos pasar
cada día. En “+ de 50 posiciones para hacer el amor con…
Dios” encontrará posiciones
reales para hacer el amor con el Todopoderoso, atendiendo, en este caso, a
posiciones que “nos hacen despertar en el camino de la vida”.
Con esta obra encontrará una buena manera de acercarte a
Dios, una senda llena de cariño y afecto, con la felicidad como la mejor
compañera.
José Alberto Jiménez